Ciática, ese dolor punzante y repentino en la pierna

¿Sientes un dolor en la parte baja de la espalda o piernas ? ¿Una sensación punzante o quemante? Este es uno de los síntomas más comunes de la ciática, la cual es una lesión en el nervio ciático.

En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre la lesión del nervio ciático (ciática) su diagnóstico, tratamiento y prevención.

Lo mejor es estar informado y saber que hacer si desarrollo este tipo de dolencias !

¿Qué es el nervio ciático ?

El nervio ciático es el nervio más largo y grueso del cuerpo. Es casi tan ancho como un dedo.

Este nervio comienza en el área de los glúteos, baja hasta justo debajo de la rodilla y luego se ramifica en otros nervios que continúan por la pierna hasta el pie y los dedos.

En realidad, se compone de cinco raíces nerviosas: dos de la región inferior de la espalda llamada columna lumbar y tres de la sección final de la columna llamada sacro.

Las cinco raíces nerviosas se unen para formar un nervio ciático derecho e izquierdo. Cada persona tiene un nervio en su pierna izquierda y uno en su pierna derecha, que bajan hasta por debajo de la rodilla.

¿Qué es la ciática?

La ciática es un dolor nervioso debido a una lesión o irritación del nervio ciático, que se origina en el área de los glúteos.

El término «ciática» se usa comúnmente para describir cualquier dolor que se origina en la parte inferior de la espalda y se irradia hacia la pierna, aún cuando este no se trate de una lesión del nervio.

Por ello la ciática es una dolencia bastante común. Por esa razón según estudios, alrededor del 40% de las personas en los EE. UU. han experimentado en algún momento de su vida.

El dolor de espalda es la tercera razón más común por la que las personas visitan al traumatólogo y al fisioterapeuta.

Evolución de la ciática

Es raro que aparezca antes de los 20 años esta dolencia. Normalmente los casos que se dan en personas que van de 50 años para arriba pero luego va en descenso.

Hay que entender que no se da por alguna lesión puntual, esto va en desarrollo con el tiempo.

Es alentador observar que muchas personas que han padecido esta dolencia lograron recuperarse en cuestión de semanas o meses.

Vale la pena destacar que gran parte del tratamiento puede obtenerse mediante métodos que no requieren cirugía.

Sin embargo, no podemos descartar que hay casos que sufren de dolencias mayores por la presión constante al nervio ciático.

En estos casos si puede necesitarse de una intervención quirúrgica. Por mencionar algunos ejemplos pueden ser debilidad de la pierna y disfunción intestinal.

Es así que la ciática es provocada por una modificación del estado fisiológico y tratada con métodos para el alivio.

Síntomas

El principal síntoma que se presenta en la persona es el dolor.

Por ello, las personas que desarrollan esta dolencia, suelen sentir un dolor de leve a severo en cualquier lugar a lo largo del trayecto del nervio ciático.

Es decir, en cualquier lugar desde la parte inferior de la espalda hasta la parte baja de las rodillas.

Es común también que cause debilidad muscular en la pierna, entumecimiento o sensación de hormigueo.

Por lo tanto las personas que tienen una lesión en el nervio ciático suelen sentir un dolor agudo punzante en algún punto a lo largo del nervio. A diferencia de otros sienten una sensación quemante o eléctrica, similar a un hormigueo.

El dolor puede ser constante o intermitente. Además, el dolor suele ser más intenso en la pierna en comparación con la zona lumbar.

El dolor puede empeorar si se sienta o permanece de pie durante largos períodos de tiempo, cuando se pone de pie y cuando gira la parte superior del cuerpo.

Un movimiento corporal forzado y repentino, como toser o estornudar, también puede empeorar el dolor.

Principales causas

La ciática puede ser causada por varias condiciones. Algunas de ellas son:

• Hernia discal: Es la causa más común. Cuando la presión entre las vertebras produce que el centro gelatinoso del disco se abulte, la hernia que se forma puede presionar el nervio ciático.
  
• Estenosis espinal: Una enfermedad degenerativa que causa que los discos entre las vertebras se desgasten, acortando su altura y haciendo que los conductos nerviosos se estrechen, reduciendo el espacio para la médula y los nervios.
  
• Espondilolistesis: Un deslizamiento de una vértebra en relación a la superior. Esto reduce la abertura por la que sale el nervio. El hueso espinal extendido puede pellizcar el nervio ciático.
  
• Osteoartritis: Formación de espolónes óseos en las espinas dorsales, producto del envejecimiento. Esto suele comprimir los nervios de la espalda baja.
  
• Tumores: Cuando se producen en el canal espinal lumbar que comprimen el nervio ciático.
  
• Síndrome piriforme: Aunque es menos común, se desarrolla cuando el músculo piriforme, un pequeño músculo que se encuentra en la parte profunda de los glúteos, se tensa o sufre espasmos.

Diagnóstico

Para diagnosticar una lesión del nervio ciático el profesional realizará un examen física y varias pruebas, a fin de determinar la ubicación e intensidad de la lesión.

Claro está que una revisión del historial médico y un análisis de los síntomas del paciente son el primer paso.

Posteriormente, el profesional realizará una prueba de elevación de la pierna recta. Ya que esta prueba permite ubicar el punto de dolor y ayuda a identificar un problema de disco.

Durante esta prueba, el paciente se recuesta boca arriba con las piernas estiradas. El profesional levantará lentamente cada pierna y determinará el punto en el que comienza su dolor.

También se le pedirá que haga otros estiramientos y movimientos para identificar el dolor y verificar la flexibilidad y la fuerza de los músculos.

Es posible que se le solicite que camine para ver cómo su columna soporta su peso.

También caminar sobre los dedos de los pies y los talones son otro método para comprobar la fuerza de los músculos de la pantorrilla.

Análisis de imágenes

Los exámenes de imágenes son complementarios al examen físico y permiten identificar otras posibles causas. Los análisis de imágenes utilizados son:

• Radiografías de la columna: Para identificar fracturas, problemas de disco, infecciones, tumores y espolones óseos.
  
• Imágenes por resonancia magnética (IRM) o tomografía computarizada (TC) para ver imágenes detalladas de los huesos y los tejidos blandos de la espalda. En la mayoría de los casos se utilizan con fines confirmativos.
  
• Una resonancia magnética puede mostrar presión sobre un nervio, hernia de disco y cualquier condición artrítica que pueda estar presionando un nervio. Las resonancias magnéticas generalmente se solicitan para confirmar el diagnóstico de ciática.
  
• Electromiografía: Que es un estudio de conducción nerviosa y permite determinar qué tan bien viajan los impulsos eléctricos a través del nervio ciático y la respuesta de los músculos.
  
• Mielograma: El cual permite determinar si una vértebra o un disco están causando el dolor.

Tratamiento ¿Cómo se trata la ciática?

Quizás te preguntes ¿Que puedo tomar si tengo ciática?

Pues bien, hay varias opciones. Ya que el objetivo del tratamiento es disminuir el dolor y aumentar la movilidad.

Dependiendo de la causa, muchos casos desaparecen con el tiempo con algunos tratamientos sencillos de cuidado personal.

Algunos de los tratamientos son los siguientes:

Aplicación de hielo y/o calor

Durante los primeros días, es recomendable la aplicación de hielo, durante 20 minutos, en forma intermitente y durante varias veces al día. Después de algunos días puede cambiarse a la aplicación de calor.

Sobre todo en algunos casos, usar ambos en forma alternada puede favorecer el alivio del dolor.

Medicamentos de venta libre

Puede tomar algunos medicamentos para reducir el dolor y la inflamación. Algunos antiinflamatorios no esteroides (AINE) como la aspirina y el ibuprofeno (Advil®, Motrin®) y naproxeno (Naprosyn®, Aleve®) puede ser de gran ayuda.

Siempre es recomendable consultar a su médico antes de tomarlos

Estiramientos suaves

Los ejercicios suaves pueden ayudarle a controlar el dolor lumbar. Es importante que cuente con la guía de un fisioterapeuta o profesional de la salud que le indique cuales ejercicios desarrollar y en qué forma.

Ya que algunos ejercicios pueden ayudarle a fortalecer los músculos centrales.

Medicamentos recetados

El profesional de la salud podría recetarle algunos relajantes musculares, como ciclobenzaprina (Amrix®, Flexeril®) y analgésicos para aliviar las molestias asociadas con los espasmos musculares. Dependiendo de la ubicación y nivel del dolor el profesional médico puede indicarle diferentes medicamentos a utilizar.

Inyecciones para el nervio ciático

Una inyección espinal de un corticoesteroide, un medicamento antiinflamatorio, en la parte inferior de la espalda podría ayudar a reducir el dolor y la inflamación alrededor de las raíces nerviosas afectadas.

Las inyecciones brindan alivio del dolor a corto plazo y se administran bajo anestesia local como tratamiento ambulatorio. Se administran bajo indicación médica.

Cirugía para solucionar la ciática

La cirugía es el último recurso, en caso de que los medios anteriores no generen un efecto positivo. En este caso y dependiendo de las causas, el médico evaluará la posibilidad de realizar una cirugía.

Fisioterapia para el tratamiento de la ciática

El objetivo de la fisioterapia es reducir la presión sobre el nervio mediante el uso de ejercicios específicos.

Un programa de ejercicios debe incluir ejercicios de estiramiento para mejorar la flexibilidad muscular y ejercicios aeróbicos, como caminar y nadar.

Es muy posible que el profesional médico le derive a un fisioterapeuta, quien le ayudará en el proceso de personalizar su propio programa de ejercicios, para poder disminuir la presión y fortalecer los músculos asociados.

La fisioterapia es excelente para el tratamiento de la ciática. Lo más importante es contar con la orientación de un fisioterapeuta profesional especializado en este tipo de tratamientos.

Ejercicios para aliviar el nervio ciático

Ante toda sugerencia en ejercicios para prevenir o aliviar el nervio ciático es fundamental consultar con el especialista para que determine la causa de esta dolencia y luego hacer terapia.

Estiramiento del piriforme

Puede ser una de las causas del dolor del nervio ciático. Para este ejercicio necesitas estar sentado en una silla, primero tu tobillo debe estar encima de tu rodilla de la otra pierna.

Luego mantén una postura recta y con tus brazos acercaras tu rodilla hacia tu hombro opuesto, esto mantendrás por unos segundos y repetirlo cinco veces.

Estiramiento del piriforme en el suelo

Este estiramiento es similar al anterior, así como en la silla pero esta vez esa posición echado al suelo estando de espalda. Con tus manos estira tu rodilla hacia tu abdomen, esto mantener por 15 segundos y repetirlo cinco veces al día.

Movimiento de las rodillas

En este paso hay que estar acostado en el suelo boca arriba, luego con las rodillas dobladas y los pies pegados al suelo ir moviendo suavemente de un lado para el otro, de izquierda a derecha.

Esto ayudara para ejercitar la espalda baja, aliviando el dolor del nervio ciático.

Estiramiento de los isquiotibiales

Este estiramiento hay que hacerlo con una postura correcta, estando parado y recto estirar una pierna sobre alguna cosa más o menos elevada, una vez estirado acercar el tronco del cuerpo bien erguido hacia la pierna estirada.

Este estiramiento se puede hacer 20 a 30 segundos de un lado de la pierna y del otro, unas 3 veces por cada uno.

Con esto lograras un mejor funcionamiento del área y reducir o agraviar la ciática.

Estiramiento Gato-Vaca

Una de las posiciones que no ayudan al nervio ciático es estar sentado o inclinado hacia adelante.

Es por eso la importancia de este estiramiento ya que no solo ayuda a aliviar el dolor sino a fortalecer la columna. Para ello se necesita que estés apoyado con las piernas y brazos.

Luego arquearas tu columna hacia arriba con la cabeza hacia abajo, y repetirás haciendo a la inversa.

Estos ejemplos de ejercicios son necesario hacerlos con mucho cuidado en cada paso.

Prevención ¿Se puede prevenir la ciática?

Es posible que no todos los casos de ciática se puedan prevenir, pues esto depende específicamente de las causas.

No obstante, hay una serie de recomendaciones que se pueden seguir para prevenir, en la mayoría de los casos. Algunas de ellas son:

• Mantener una buena postura: Esto ayuda a liberar presión en la parte inferior de la espalda. Es importante mantener una posición adecuada mientras se esta sentado, de pie, durmiendo o mientras se manipulan objetos pesados.
  
• Mantenga un peso saludable: El sobre peso genera tensión extra en la columna. Alimentarse adecuadamente y en forma saludable le ayudará a mantener un balance adecuado en su columna vertebral.
  
• Evitar fumar: La nicotina reduce el suministro de sangre a los huesos. Esto debilita la columna y a los discos vertebrales generando más presión.
  
• Haga ejercicio: Realice estiramientos para mantener las articulaciones flexibles y ejercicios para fortalecer los músculos de la parte inferior de la espalda y el abdomen. Evite el sedentarismo. Realice actividades físicas de bajo impacto, como nadar o caminar.
  
• Evite las caídas: Utilice zapatos adecuados y mantenga las escaleras y los pasillos libres de obstáculos para reducir la posibilidad de una caída. Este es un factor crítico especialmente para personas de la tercera edad.

Preguntas frecuentes

¿Que hacer si tengo ciática ?

La mayoría de las personas buscan remedios caseros, sin embargo, es recomendable visitar al profesional médico con el fin de diagnosticar y tratar la dolencia adecuadamente.

La ciática tiene cura, pero requiere tratamiento. Al igual que toda las enfermedades la atención temprana siempre es muy positiva.

¿Puedo padecer de ciática en ambas piernas?

La ciática generalmente afecta solo una pierna a la vez. Sin embargo, es posible que ocurra en ambas piernas. La ubicación donde el nervio se comprime a lo largo de la columna vertebral determinará este aspecto.

¿La ciática ocurre repentinamente o tarda en desarrollarse?

La ciática puede aparecer repentina o gradualmente. Esto depende de la causa de la lesión.

Por ejemplo, una hernia de disco puede causar dolor repentino al comprimir el nervio ciático. Sin embargo, la artritis en la columna vertebral se desarrolla lentamente con el tiempo y puede generar la ciática en forma progresiva.

¿Porqué las mujeres embarazadas pueden desarrollar ciática?

La ciática durante el embarazo, se debe principalmente a la lesión de las vertebras y los discos.

Las mujeres embarazadas, debido a los cambios hormonales, fisiológicos y peso del bebé, están más expuestas a las lesiones de la columna vertebral.

La inflamación de los tejidos suele causar presión sobre el nervio ciático, generando dolor y malestar en las piernas.

La buena noticia es que hay maneras de aliviar el dolor ciático durante el embarazo y el dolor desaparece después del nacimiento.

La fisioterapia, los masajes terapéuticos, las duchas tibias y el uso de algunos medicamentos pueden ayudar a aliviar el dolor.

Esto sumado al desarrollo de una buena postura durante el embarazo, suele mejorar bastante los síntomas.

¿Cómo saber si el dolor en mi cadera es ciática?

Si su dolor comienza en la espalda y se mueve o se irradia hacia la cadera o la pierna y tiene entumecimiento, hormigueo o debilidad en la pierna, la causa más probable es la ciática.

¿Debo descansar si padezco de esta dolencia?

Aunque posiblemente requiera de un poco de descanso, es importante mantener tanta actividad como sea posible para mantener los músculos flexibles y fuertes. El descanso excesivo puede empeorar las cosas.

¿Puede la ciática hacer que mi pierna o tobillo se inflamen?

Si, ya que es causada por una hernia de disco, estenosis espinal o un espolón óseo que comprime el nervio ciático. Esto puede causar inflamación en la pierna afectada. Las complicaciones del síndrome piriforme también pueden causar inflamación en la pierna.

Lesión del nervio ciático – Resumen

La ciática es una dolencia bastante común. La mayoría de los casos no requieren cirugía y pueden curarse con un tratamiento adecuado y el autocuidado.

El dolor punzante, el hormigueo y sensación quemante en la espalda baja y pierna son los síntomas más comunes.

Si estás experimentando alguno de los síntomas mencionados, es muy importante que puedas visitar a un profesional de la salud.

Y si tienes ciática, es muy probable que el profesional de la salud te derive al fisioterapeuta, a fin de desarrollar un programa de tratamiento y recuperación efectivo.

Si padeces de ciática y tienes preguntas respecto al tratamiento con fisioterapia, por favor contáctanos.

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